Hace poco comentábamos aquí el lanzamiento de la nueva versión de GIMP, y hubo un poco de debate en los comentarios sobre si GIMP era más fácil de usar que Photoshop o no. Cada uno puede tener su propia opinión, claro, pero lo cierto es que si estás acostumbrado a usar Photoshop, hacerte con las herramientas y los menús de GIMP puede costarte un poco.
Por suerte, hay algunos trucos que puedes aplicar para que la transición sea menos dura, y puedas sacarle todo el partido a GIMP igual que lo hacías antes con Photoshop sin tener que aprender de cero cómo usar todas las utilidades del programa. Presta atención y mira cómo puedes hacer que GIMP se parezca a Photoshop para usarlo con más agilidad.